“El amigurumi, una técnica de arte que consiste en tejer a crochet pequeñas criaturas y objetos rellenos de lana, representa no solo una expresión artesanal, sino también una fuente de ingresos”, afirmó Leydi Bellido Buitrón, fundadora de Amigart, quien manifestó que su emprendimiento, especializado en la confección de personajes tejidos a crochet, ramos de flores personalizadas y otros productos decorativos, ha mostrado un crecimiento sostenido en los últimos meses, logrando un aumento significativo en sus pedidos semanales. Esta demanda no solo está permitiendo consolidarse en el mercado local, sino que también proyecta una expansión hacia otras regiones del país.
El impacto económico de Amigart va más allá de la generación de ingresos personales, ya que el emprendimiento fomenta el consumo de insumos provenientes de la región. “Para la elaboración de nuestros productos adquirimos lana y otros materiales a proveedores locales, lo que fortalece la cadena productiva y genera oportunidades para otros pequeños comerciantes”, destacó Bellido.
A futuro, busca formalizar su negocio para acceder a ferias nacionales e internacionales, estableciendo alianzas estratégicas que le permitan llevar sus productos a nuevos mercados y contribuir a la dinamización del sector artesanal en Ayacucho.
El crecimiento de emprendimientos como Amigart demuestra el potencial de la textilería como motor de desarrollo económico. La generación de empleo en el sector artesanal y el acceso a mercados más amplios pueden consolidar a Ayacucho como un referente en producción textil.
“La demanda de productos hechos a mano sigue en aumento, y nuestra meta es posicionar el amigurumi ayacuchano en el comercio nacional e internacional”, concluyó Bellido.
Amigart se encuentra en Facebook como Amigart y en Instagram como Amigart Ayacucho, además de atender pedidos al 935 337 672.