El arte milenario de la cerámica ayacuchana sigue traspasando fronteras gracias a la labor del taller “Cerámica Ancestral Taruka”, fundado por Willy Taruca Díaz Ríos, conocido como “Taruka”. “Desde 2016 me dedico a investigar y trabajar la cerámica en Ayacucho, logrando desarrollar técnicas que revaloran la cultura Wari”, expresó el artesano.
Su taller elabora piezas utilitarias y decorativas, como vasos, platos y tazas, todas inspiradas en la flora, fauna y simbología ancestral de la cultura de Wari. Además, ha logrado formular la arcilla local que resiste altas temperaturas, permitiendo mejorar la calidad y durabilidad de sus creaciones.
El trabajo de “Cerámica Ancestral Taruka” ha sido reconocido en ferias nacionales y ha logrado ingresar al mercado internacional. “En 2024 enviamos una muestra de 22 piezas a Corea del Sur, un gran paso para la difusión de nuestro arte”, señaló Taruka.
Asimismo, ha participado en ferias en Lima y Ayacucho, donde sus creaciones han sido apreciadas por el público. Su enfoque no solo busca preservar técnicas ancestrales, sino también innovar en el uso de pigmentos naturales para garantizar la autenticidad de cada pieza.
Además de la producción de cerámica, el taller ofrece espacios de formación para quienes desean aprender el oficio. “Impartimos talleres desde cero para que las personas experimenten el proceso y se conecten con nuestra cultura”, explicó Taruka.
Muchos de sus alumnos encuentran en la cerámica una vocación artística o un medio de desarrollo personal. Sus trabajos pueden adquirirse en la Casa Museo Joaquín López Antay y a través de redes sociales como Instagram, Facebook y TikTok bajo el nombre “Cerámica Ancestral Taruka”. Finalmente, el artesano invita a valorar y apoyar el arte ayacuchano, destacando su riqueza cultural y su potencial en el mercado internacional.