“Buscamos generar oportunidades laborales en condiciones dignas para mujeres de bajos recursos”, afirmó Marta Risco Mendoza, gerente de la unidad de negocios de Diamanta. Esta empresa ayacuchana, que forma parte del grupo Solid Perú, trabaja desde hace 13 años con más de 300 tejedoras distribuidas en zonas periurbanas y rurales, como San José de Ticclla y el distrito de Luricocha. Su producción se destina en un 100 % al mercado internacional, especialmente a países como Bélgica, Holanda, Austria e Inglaterra. En 2024, elaboraron alrededor de 34 mil piezas, todas hechas a mano, incluyendo chompas, chalinas, ponchos, frazadas, guantes y otros accesorios.
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Risco destacó que el modelo de negocio de Diamanta se basa en producir para marcas internacionales ya posicionadas, como AS Adventure, Miami y entre otros, lo que permite asegurar un flujo constante de pedidos en volúmenes sostenidos. Las tejedoras reciben capacitación continua en habilidades técnicas y blandas, además de un acompañamiento especializado para garantizar que los productos cumplan con estándares internacionales.
“Muchas de ellas son mujeres quechuahablantes o migrantes que enfrentan barreras sociales y económicas, pero que encuentran en el tejido una oportunidad de desarrollo”, sostuvo.
Además de generar empleo, Diamanta impulsa acciones de apoyo integral para las madres trabajadoras. La empresa ha implementado una guardería y mantiene un convenio con un Pronoei para atender a niños de 0 a 5 años, además de ofrecer reforzamiento escolar a menores de hasta 10 años. “En el taller principal, ubicado en el jirón Puca Cruz, se reúnen más de 180 tejedoras, mientras que muchas otras trabajan desde sus hogares”, señaló Risco.
Con la proyección de abrir un punto de venta local, Diamanta busca acercarse también al mercado nacional y seguir consolidando su compromiso con el desarrollo social y económico de las mujeres ayacuchanas.
