“Venimos emprendiendo es el rubro de talabartería y realizamos productos a base de suelilla como correas, collares, pulseras, sandalias, carteras y monederos”, destacó Paola Sulca Llaqtahuaman, alumna de la institución educativa Mariscal Cáceres. La estudiante resaltó que, junto a sus compañeros, recibe la enseñanza del maestro Víctor Revollar, quien los guía en cada etapa del proceso de elaboración. Con entusiasmo, afirmó que este oficio se ha convertido en una manera de unir creatividad, tradición y oportunidad de negocio en Ayacucho.
Actualmente, son 18 los estudiantes que participan en esta iniciativa, como parte de la formación que les brinda la institución. “La institución educativa busca darnos una alternativa para sostenernos en esta sociedad, y la talabartería se ha convertido en una opción viable”, añadió Sulca. El curso comenzó en marzo de este año y ha permitido que los alumnos evolucionen desde la creación de pequeños accesorios como correas y llaveros, hasta productos más complejos como carteras y sandalias, que requieren mayor tiempo, precisión y resistencia.
El proyecto también representa un aporte económico y social. “Por el momento compramos materiales en una tienda de cueros, pero proyectamos hacer un contrato e invertir más para captar la atención de turistas”, manifestó la estudiante. Cada producto tiene un proceso particular: un llavero puede tomar una hora de trabajo, mientras que una correa requiere hasta 30 minutos. Los interesados en adquirir estos artículos pueden realizar sus pedidos al número 910 947 781, a nombre del maestro Víctor Revollar.