REDACCIÓN I PORTAL AYACUCHO
El jefe de la Oficina Defensorial de Ayacucho, David Pacheco Villar, aseguró que la actual situación de la salud es todavía precaria en la zona del Valle del Río Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), donde en los establecimientos de salud, como Kimbiri y Pichari, se han verificado una serie de carencias en infraestructura y equipos biomédicos. Esta preocupante situación se pudo evidenciar gracias a la labor del módulo de atención de la Defensoría del Pueblo, ubicada en el distrito cusqueño de Pichari, el cual atiende a seis distritos de la provincia La Mar y tres de Huanta.
“Tener un módulo de atención en el Vraem nos permite tener una mirada más cercana de cómo va el respeto de los derechos humanos relacionados con la salud. Recientemente, hemos tenido que intervenir en el caso de una muerte materna ocurrida en esta zona, asimismo, estamos interviniendo en el caso de madres gestantes que han recibido atenciones en los hospitales del Vraem y han tenido que ser referidas al Hospital Regional de Ayacucho (HRA) y, por otro lado, hemos logrado que un padre de familia del Vraem, que no podía costear un análisis de manera particular lo haga en el HRA, esto a consecuencia de una falta de coordinación entre el departamento de médicos y el laboratorio”, manifestó.
De igual forma, puso en consideración que muchos de los hospitales que funcionan en el Vraem no han sido culminados y las autoridades le han echado la culpa a la pandemia; sin embargo, recordó que ya se cuenta con nuevas gestiones al frente del Gobierno Regional de Ayacucho y el Cusco para cambiar esta realidad, con la finalidad de brindar adecuadas condiciones de infraestructura a la población.
