REDACCIÓN I PORTAL AYACUCHO
La exministra de Desarrollo e Inclusión Social Paola Bustamante señaló que el liderazgo de las nuevas autoridades regionales y municipales es clave para poder luchar contra la anemia y la desnutrición crónica, dos de las enfermedades que afectan más a los niños de diferentes regiones, entre ellas Ayacucho.
Como se recuerda, recientemente la Municipalidad provincial de Parinacochas informó que el distrito con mayor índice de anemia es San Francisco de Rayacayco (50%), Upahuacho (43.8%) y Coronel Castañeda (41.7%) y en cuanto a desnutrición crónica el mayor índice lo tiene Coronel Castañeda (25.7%) seguido de Upahuacho (20.7%) y Coracora (16.3%).
Bustamante Suárez dijo que actualmente los titulares de los gobiernos locales pueden coordinar con los centros de salud para garantizar la entrega de sulfato ferroso (hierro) a los niños, liderar campañas de información hacia las familias sobre las consecuencias de la anemia y la desnutrición.
“Las autoridades locales pueden informar sobre las enfermedades, verificar que los centros de salud tengan el sulfato ferroso (…) ellos juegan un rol central y además hay herramientas del estado que pueden generar incentivos económicos para la lucha contra la anemia”, dijo la exministra de Desarrollo e Inclusión Social.
El estado a través del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social promueve reconocimientos públicos para las municipalidades que avanza en la reducción de este tipo de brechas como el Sello Municipal denominado Incluir para Crecer y también hay incentivos municipales disponibles del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
“Existen herramientas monetarias y no monetarias en el estado para luchar contra la anemia, los alcaldes tienen el reto enorme de entrar al sello municipal a los incentivos municipales”, precisó Bustamante.
Círculo de la pobreza
Finalmente, la extitular del MIDIS indicó que la presencia de anemia y desnutrición crónica afectan el desarrollo físico y mental de los niños perjudicándolo en sus estudios y obligándolos a abandonar los colegios para luego repetir el llamado “círculo de la pobreza”.
