REDACCIÓN I PORTAL AYACUCHO
El exministro de Economía y Finanzas (MEF) Luis Miguel Castilla, consideró que pese a tener grandes potenciales turísticos, agrícolas y mineros, la región Ayacucho aún no puede superar sus brechas sociales debido a factores como la incapacidad de gestión, la corrupción y la poca atracción a la inversión privada.
Economista sostuvo que región aún no es competitiva como otras regiones, pese a tener grandes potenciales turísticos, agrícolas y mineros.
“Ayacucho sigue siendo una región con mucho potencial, pero aún con importantísimas brechas sociales que no logra romper por falta de gestión, por corrupción y porque todavía no existe la escala que amerite el ingreso de la empresa privada, como en otras regiones vecinas como Arequipa o Cuzco”, dijo Castilla.
Enseguida detalló: “Vemos que Ayacucho aún tiene importantes brechas sociales, el nivel de pobreza está por encima del promedio nacional, los niveles de desnutrición y anemia infantil están por encima de lo que se observa en otras partes del país. Creo que la competitividad de la región, en el aspecto económico, está muy por debajo de otras regiones que son mucho más dinámicos en el resto del país, especialmente en el norte”, dijo Castilla.
Explicó que, aunque Ayacucho tiene un potencial turístico importante y ha mejorado sus interconexiones aéreas, aún no es un destino obligado para los turistas extranjeros como si lo son, por ejemplo, las regiones de Cuzco y Arequipa o incluso en la Amazonía.
Respecto a la actividad agrícola, dijo que todavía se encuentra reducida por la falta de infraestructura de irrigación y un valor agregado que le permita mirar a la agroexportación hacia el mercado internacional, como ocurre en la región San Martín con el café, cacao, entre otros cultivos.
En tanto que, sobre los proyectos mineros, el exfuncionario mencionó que muchos de estos todavía no tienen la capacidad de generar encadenamientos hacia otros sectores productivos, principalmente por la falta de conectividad, infraestructura, o personal humano con capacidades técnicas en la región.
En tal sentido, recomendó a las nuevas autoridades regionales y municipales que asumirán funciones desde el 1 de enero a trabajar para destrabar los proyectos públicos paralizados, pero además propiciar intervenciones que motive la inversión privada que pueden generar oportunidades de trabajo y bienestar.
