REDACCIÓN I AGENCIAS
Los peruanos hemos enfrentado diversos desafíos en los últimos años, entre ellos, la pandemia, un panorama externo desfavorable, retrocesos en el manejo económico, inestabilidad política y desastres naturales como el ciclón Yaku. Todo esto ha afectado la economía del país, que se ha visto golpeada. Así lo explicó el economista Oswaldo Mendoza, Director Ejecutivo de la Red de Estudios para el Desarrollo (Redes).
Si bien el Perú ha crecido en promedio un 3% al año entre 2016 y 2022, el crecimiento promedio anual fue de 4,7% entre 2009 y 2015. Esto significa que el país está creciendo en promedio 1,7 puntos porcentuales menos cada año, lo que se traduce en menos empleo y más pobreza en el país, indicó Molina. El crecimiento económico del Perú ha disminuido en comparación con otros países de la región.
El complejo panorama actual ha determinado que la proyección de crecimiento del primer trimestre de 2023 sea nula. Las proyecciones de crecimiento para este año también han sido rebajadas, aunque el 40% del PBI sí puede ser manejado mejorando las expectativas y la inversión en el país. La precarización del empleo, con un aumento de la informalidad y peores condiciones laborales, se ha traducido en menores ingresos y un aumento de la pobreza.
Frente a estas cifras económicas, de acuerdo con Molina, existen 2 retos. El primero es ser capaces de mejorar las expectativas empresariales y enrumbar, de esa manera, tanto la inversión como el crecimiento. Y atender problemas fundamentales como la disminución de la inestabilidad política, la mejora de la capacidad estatal para brindar servicios públicos de calidad en todos los niveles de gobierno y retomar la reducción de la pobreza.